Cuando se llega el momento del retiro laboral o jubilación, para algunos esto representa el comienzo a disfrutar de una vida de descanso, de reposo. No tener que levantarse temprano todos los días, olvidarse de las prisas para ir al trabajo, llegar agotado a casa después de un arduo día de labores, de enfrentarse al mundanal tráfico, a las aglomeraciones en el transporte público, o quizá a un ambiente laboral estresante. Se presenta la oportunidad de disfrutar de aquello que se ha logrado tras una vida de continuo esfuerzo y trabajo. Quizá, para emprender el tan anhelado viaje con la pareja, o dedicarse a realizar algún hobbie que durante tanto tiempo se postergó o quedó sólo en planes.
Desafortunadamente, ésta no es una historia común porque, para otros, la jubilación puede tener consecuencias negativas tales como el estrés al cambiar de hábitos, la reducción de ingresos económicos, tristeza, apatía y/o melancolía por los tiempos pasados durante la etapa productiva y que, en algunos casos, puede conducir a la depresión, baja autoestima y/o aburrimiento. En esta etapa de la vida pueden presentarse cambios en la salud, lo que dificulta el disfrute de actividades dentro o fuera de casa.
La jubilación no tiene por qué ser la antesala de la muerte, sino esa etapa donde te relajes, y lo disfrutes. Recuerda que todos podemos ser felices, si así lo decides. Tu escoges si sufres o eres feliz. Cierto, al final de la vida, la consecuencia final es la muerte, pero no tienes que morirte hoy, aún te quedan muchos momentos de alegría. Cierto también, que es una etapa en la que aquejan las enfermedades, o simplemente, los achaques propios de la vejez.
Si te sientes triste, deprimido, estresado o con poca valía, busca ayuda profesional si fuere necesario. Pero no te quedes ahí, inmóvil, sin hacer nada. Pensar hasta el agobio en tus problemas no te ayuda, te niegas la posibilidad de ser feliz y se la niegas también a aquellos que se preocupan por ti. Por ello, te hago las siguientes recomendaciones:
¡Haz de tu jubilación una aventura!
- Mantente activo: La actividad mantiene ocupada tu mente (estimulación cognitiva), interesada en nuevas actividades evitando que la ocupes en temas negativos. Puedes leer, escribir, hacer crucigramas, jugar ajedrez, dominó, póquer o cualquier otro tipo de actividad mental que estimule tu imaginación.
- Aceptación: Aceptar que la jubilación es el merecido premio a tu esfuerzo de tantos años. Que ahora puedes dedicarte a hacer lo que has deseado hacer, sin cortapisas.
- Ser optimista: El optimismo te brinda mayores efectos benéficos a la salud. El pesimismo y la amargura debilitan el sistema inmunológico.
- Cuida tu salud: Conservar un estado saludable te permite una mejor calidad de vida y que vivas la jubilación en todo su esplendor.
- Practica algún pasatiempo: Los pasatiempos, además de tener ocupada tu mente, te brindan grandes satisfacciones ya que, ahora, es posible realizar tareas que dejamos pendientes, que alguna vez quisimos realizar como alguna artesanía, arte como la pintura, el dibujo, la escultura, el tallado de madera o algún tipo de juego que no implique riesgo de tu salud.
- Servicio comunitario: Si eres sociable y te gusta, puedes realizar trabajos en grupos comunitarios. Ayudar a otros eleva nuestra estima y nos sentimos útiles, nos sentimos mejor, además de que ampliamos nuestro círculo social.
- Viajar: Nos permite conocer lugares, costumbres, comidas. Recuerda que existen descuentos en transportes y servicios, cine, teatro, museos y otros. Infórmate y verás que hay lugares accesibles a tu economía.
- Mantenerte en forma física: Puedes asistir a un gimnasio y hacer ejercicio de bajo impacto (recuerda que ya no estás tan joven), breves caminatas cada tercer día y otras actividades parecidas. El ejercicio brinda grandes satisfacciones, además de mejorar la salud.
- Tiempo de ocio: Reunirse con la familia sin más justificación que pasar un rato agradable, convivir con los nietos, o visitar a los amigos, charlar mientras se bebe una rica taza de aromático café, te dará ricos ratos de esparcimiento y relajación.
Las recomendaciones que propongo son apenas una probadita de las cosas que puedes hacer. Seguramente tu podrás agregar otras actividades.
Haz una lista en compañía de tu pareja, familiares y/o amigos y ¡lánzate a la aventura y sé feliz!
Cuando nos acercamos a esa etapa final de nuestra vida laboral, nos acometen muchas interrogantes. Empezamos a estresarnos, a dudar de nuestra valía, en qué vamos ocupar tanto tiempo libre. Hacemos planes, pero dudamos, extrañamos a nuestros compañeros y amigos. Observamos que algunos ya no nos acompañan en esta vida y empezamos a recordar con nostalgia los momentos vividos. Si empezamos a sentir mucha tristeza y esta nos lleva a la depresión, no esperes más, es el momento de buscar ayuda.
Recuerda, en el Centro Alternativa Psicológica Integral estamos para ayudarte. Llama al (55) 6795 1043 o envía un correo a: informes@centroapi.com.mx