El sueño es un proceso útil y necesario para todos los seres vivos. Sin embargo, existen trastornos que nos impiden tener un sueño tranquilo y reparador y que nos afectan con diversos síntomas.
Aunque los trastornos del sueño no son una patología grave en sí misma, causan anomalías en nuestra vida diaria, entre otros: agotamiento físico, bajo rendimiento, sueño diurno, dificultades laborales, familiares o sociales, problemas para conciliar el sueño o para mantenerse despierto, comportamientos inusuales durante el sueño, etc.
Entre otros, hay trastornos como: insomnio, hipersomnia, narcolepsia, ronquidos y apneas del sueño, parasomnias, síndrome de las piernas inquietas, terrores nocturnos, pesadillas, sonambulismo…
Hagamos un breve repaso de algunos trastornos asociados al sueño.
El insomnio
Es la incapacidad para conciliar el sueño y permanecer dormido toda la noche, puede tener su origen en trastornos como la depresión o la ansiedad. Las personas necesitamos alrededor de 7 a 9 horas diarias de descanso, quienes han pasado una noche intranquila o con insomnio suelen sentirse somnolientas a lo largo del día y afecta a su desempeño.
Un problema que se observa en ocasiones durante el insomnio es el síndrome de “piernas inquietas”, que consiste en un hormigueo que obliga al individuo a moverlas constantemente y hace difícil conciliar el sueño.
La apnea del sueño
Es un trastorno que se caracteriza por una pausa en la respiración durante el sueño; suele durar poco y la persona vuelve a respirar normalmente con un ronquido fuerte. Es un trastorno crónico que altera el sueño provocando que la persona no descanse adecuadamente.
Quien padece este síntoma no tiene conciencia de ello.
El tipo de apnea del sueño obstructiva impide el paso del aire por las vías respiratorias; se presenta frecuentemente en personas con sobrepeso y, si no se trata oportuna y correctamente, puede conducir a periodos de anoxia, en los cuales, la falta de oxígeno en el cerebro puede dañar algunas neuronas e incrementar la probabilidad de un ataque cardíaco.
La narcolepsia
Esta condición se debe a una anomalía que altera los mecanismos neuronales del sueño. Son repentinos episodios de sueño en horas de vigilia en la que la persona puede quedarse dormida algunos minutos en cualquier lugar y circunstancia, y se despierta sintiéndose relajada. Puede ocurrirle conduciendo, hablando o, simplemente, paseando.
Una variedad de esta enfermedad es la cataplejía que se caracteriza por una parálisis total que ocurre durante la etapa de vigilia debido a una debilidad muscular que hace que la persona quede totalmente paralizada y caer.
Alucinaciones hipnagógicas
Consiste en ensueños vívidos que ocurren mientras la persona se encuentra despierta y justo antes de dormir.
La parálisis del sueño
Este fenómeno suele presentarse justo poco antes del sueño o al despertar por la mañana, pero comúnmente cuando no representa peligro real para la persona.
Durante el sueño REM (movimiento rápido de los ojos, por sus siglas en inglés) la persona se encuentra paralizada corporalmente, de no ser por eso, la persona actuaría sus sueños, levantándose y moviéndose sin ser conscientes de ello, lo que podría causarles lesiones.
El sonambulismo
El sonambulismo en los niños suele deberse a fatiga, falta de sueño o ansiedad; en los adultos puede deberse a trastornos mentales o ingesta de alcohol entre otras. Estas personas pueden levantarse y moverse con normalidad. Los episodios suelen ser breves y si no se les despierta volverán a la cama o quedarse dormidos en cualquier otro lugar. También puede presentarse la ingesta de alimentos mientras la persona está dormida.
Terrores nocturnos
Los terrores nocturnos suelen ser más comunes en niños de 3 a 7 años. El niño puede estar en estado de shock, muy desorientado, sudando o respirando agitadamente.
Todo individuo necesita de un sueño reparador todos los días para estar suficientemente preparado para las actividades que así lo requieren.
Por ello, si padeces algunos de los síntomas anteriormente mencionados acude con tu médico y, si fuera necesario, con tu psicólogo/a. La Terapia Cognitivo-Conductual tiene solución con las técnicas adecuadas para muchos de estos trastornos.
En el Centro Alternativa Psicológica Integral tenemos la solución a éste y a otros problemas mentales y emocionales. Llama al teléfono (55) 6795-1043, o envía un correo a: informes@centroapi.com.mx para mayor información o concertar una cita.